El Dragón Europeo
El dragón europeo (o dragón heráldico) correspondería con la imagen de dragón que todos tenemos en mente: una serpiente alada con cuatro
patas. Aunque, dependiendo de la zona, los dragones heráldicos pueden tomar detalles concretos que diferenciaría a los dragones europeos unos de otros.
Los Dragones en Europa y sus significados
En el folclore europeo, los dragones suelen representar el mal, así como los causantes de la desolación o anunciantes malos augurios. Esta es una de las principales diferencias con los dragones chinos, normalmente representados como criaturas del bien.
El hecho de que los dragones europeos fueran representantes de la maldad, considerados malévolos incluso, vino con la llegada de la cristiandad. Indagando más sobre esto, descubrimos dragones pre-cristianos, como Y Ddraig Goch, el dragón rojo de Gales, que eran considerados benévolos, e incluso representantes de la sabiduría entre otras virtudes (Veremos esto más adelante).

Incluso, siguiendo con la cultura galesa, se ha llegado a sugerir que el mítico nombre Pendragon, vino de la traducción de “cabeza del dragón”, nombre de un comandante sármata en la Ribchester subrromana. Se dice que el escudo de armas de este personaje sármata estaba adornado con dos dragones de oro, coronados en rojo y en pie, espalda contra espalda.
Uno de los hechos más curiosos sobre la mitología de los dragones, es las diferentes acepciones e ideas que se les atribuyen dependiendo de la cultura, pero lo más curioso, es que los dragones, independientemente de cómo fueran considerados, han estado presentes en muchas sociedades como parte de su mitología e historias.
Gracias a esta riqueza de representaciones sobre los dragones, en concreto al tema que nos atañe, los dragones europeos, ha dado pie a numerosas ramificaciones de especias de dragón a partir del Dragon Heráldico. Principalmente mencionaremos el más famoso, el wyvern, entre otros muchos que hemos mencionado en otros posts.

En la representación del dragón europeo como criatura malévola encontramos su más representativa imagen recogida en la historia de San Jorge y el Dragón. Ahí vemos como la cristiandad dotó al Dragon de una connotación negativa, incluso diabólica. Representado como una serpiente alada, con garras de águila y cuatro patas.
Pero, como ya mencionamos antes, no siempre fueron representantes del mal. Antes de la llegada del cristianismo, debido a sus características como la longevidad, o enorme e imponente tamaño, se les relacionaba a menudo con la sabiduría y la fuerza.
Características del Dragón Europeo
El principal aspecto de los dragones europeo, y quizás lo que le diferencia de los dragones de otras culturas, es su capacidad para escupir fuego. Además, esto dio pie a otro tipo de variantes basados precisamente en este aspecto, como dragones de escarcha, rayo o venenos, entre otros tipos de letales alientos.
De las primeras alusiones a la habilidad de escupir fuego de los dragones europeos, se encuentran en el libro “Historia regum Britanniae” (Historia de los reyes de Britania), escrita por Godofredo de Monmouth, un clérigo cristiano de entre 1130 y 1136. Dentro de este libro se menciona que los dragones vivían en el subsuelo protegiendo la tierra, y que estos poseían la habilidad de escupir fuego por la boca.

Otros datos curiosos sobre los dragones europeos

Habiendo entendido el origen de los dragones, y como dependiendo de la sociedad y año en el que los encontremos, eran representados de diferentes formas, incluso llegar a subdividirse en diferentes tipos de razas de dragones. Hay muchos datos curiosos que son el punto en común entre los dragones de diferentes lugares, sirviendo de nexo para que hoy podamos entender por que concebimos a los dragones europeos como los conocemos.
A pesar de lo que se podría pensar, no hay evidencias de que las historias de dragones surgieran en base a fósiles dinosaurios. Esto hace más fascinante aún el misterio de los dragones y por qué se parecen tanto dentro de culturas y sociedades muy diferentes.
A continuación, algunos datos que sirven de punto en común para la mayoría de las historias de la mitología europea sobre los dragones:
- En muchos relatos europeos, los dragones custodiaban un tesoro acumulado durante años.
- Ninguna otra criatura fantástica ha aparecido de tantas formas diferentes y variadas en nuestra mitología.
- Generalmente, los dragones viven en ríos o en cuevas y simas subterráneas.
- Se especula que la idea de que los dragones escupiesen fuego pudo ser en base a las cobras escupidoras, una serpiente capaz de disparar su veneno ácido a gran distancia.
- En muchas culturas del mundo, para bien o mal, los dragones tienen una gran relevancia espiritual.
- Los dragones europeos son los más típicos, principalmente por su presencia en las obras de ficción modernas.
Extra: En la cultura Indoeuropea, como la rusa, algunos dragones tienen nombres turcos (como Tugarin Zmeyevich), probablemente representando a las hordas mongoles u otros pueblos nómadas de las estepas que a menudo hostigaban los territorios europeos. Además, algunas estructuras prehistóricas en Kiev, como el muro de la Serpiente, se han asociado a los dragones, recalcando así la presencia de estas criaturas en la cultura europea.
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